domingo, 18 de julio de 2010

Dos terroristas murieron durante enfrentamiento con el Ejército en el VRAE

Al menos dos miembros del grupo terrorista Sendero Luminoso murieron el domingo tras un enfrentamiento con militares en una zona del Valle de los Ríos Apurímac y Ene (VRAE), donde los remanentes senderista operan en alianza con narcotraficantes, informó el Ejército.

El choque se produjo cerca de las 17.45 horas en la localidad de Ayacucho, ubicada dentro de la llamada región del VRAE -uno de los bastiones de la guerrilla y el narcotráfico-, precisó el Ejército en un comunicado.

“Patrullas de las Fuerzas Armadas se enfrentaron con una columna de terroristas (...) como consecuencia del enfrentamiento fallecieron dos narcoterroristas y se presume que haya varios heridos”, afirmó el Ejército.

El Gobierno lanzó una ofensiva en las localidades donde opera la guerrilla, en un intento por contener un rebrote de la violencia, pero en más de un año el saldo es de unos 50 militares y policías muertos en enfrentamientos o ataques rebeldes.

Asimismo, la policía y funcionarios antidrogas reiniciaron en enero un programa de reducción de los cultivos de la hoja de coca.

Analistas afirman que los ataques o emboscadas de los rebeldes aumentarán en los próximos meses, a medida de que se acercan las elecciones regionales en octubre y los comicios presidenciales en el primer semestre del 2011.

miércoles, 7 de julio de 2010

El lobo con piel de cordero "Octavio Salazar Miranda"

Decir, como lo hemos hecho, que el autodenominado Sendero Luminoso es un movimiento políticamente derrotado no significa que este grupo haya desaparecido, pues es evidente que ahora asume modalidades distintas para los mismos fines, pero su capacidad para convertirse en una amenaza consistente, una alternativa de poder, para el Estado Nacional, es casi nula. No olvidemos que esta derrota tuvo un hito fundamental en la captura de los cabecillas senderistas en la década pasada gracias al trabajo de inteligencia policial. Sendero Luminoso quiere ahora sobrevivir, hibernar esperando mejores tiempos, pero no ha cambiado su esquema ideológico tercamente dogmático y fundamentalista.

La historia del siglo XX está plagada de ejemplos de utilización perversa de los mecanismos de la democracia para dinamitar por dentro la democracia misma. Es imprescindible que todos aquellos quienes creemos que la democracia es el mejor de los sistemas permanezcamos alerta antes las nuevas modalidades de violencia encubierta por parte de organizaciones y personas que no creen en la democracia y sólo buscan aprovecharse de ella para convertirla en caja de resonancia de su ideología.

Los frentes de combate, en los que el senderismo se ha convertido en una gavilla de sicarios del narcotráfico, están perfectamente focalizados y la policía, junto con el ejército, viene asestando duros golpes a estos remanente sediciosos.

Pero este no es el único frente que debe preocuparnos. Hay otras nuevas modalidades que involucran infiltración de Sendero Luminoso en organizaciones sindicales, sociales, políticas, universitarias. Este fenómeno fue advertido por nosotros en su momento.

Tenemos que aprender las lecciones de lo vivido. La estrategia actual de SL pasa por infiltrar organizaciones democráticas tratando de manipularlas y utilizarlas para sus fines, explotando sus debilidades, necesidades, carencias y contradicciones. Hay un territorio indefinido, no adecuadamente reglamentado, una zona gris en la que esta gente se mueve con soltura aprovechando por ejemplo la autonomía universitaria o la libertad de expresión.

Como es evidente, vencer a un enemigo que esconde la cara y se cobija bajo la penumbra de estas zonas grises, requiere de un esfuerzo en el que las fuerzas del orden tienen un rol directriz, pero no puede concebirse exitoso sin el concurso de todos, todos los niveles de gobierno, las organizaciones sociales, las autoridades universitarias, los profesores, el Poder Judicial, el Ministerio Público, el Congreso de la República, todos.

Ahora, como ocurrió en algún momento de la historia reciente, la batalla decisiva es política, pasa por la ideología, por la convicción democrática, por reforzar las organizaciones e instituciones sociales para reducir ese margen de maniobra, esas zonas grises en las que el lobo disfrazado de cordero pretende medrar y avanzar.

Tenemos que ver con cuidado los alcances de la autonomía universitaria, abordar temas complejos tales como las condiciones de excarcelación, los beneficios penitenciarios a terroristas convictos y confesos. Sobre algunos de estos asuntos hemos entregado un conjunto de sugerencias al Congreso, a modo de ayuda memoria, para su evaluación y discusión. Entretanto la inteligencia policial sigue trabajando.

Ministro del Interior